miércoles, 8 de octubre de 2008

Conversaciones pendientes..

Aparecimos con la idea de romper una historia de desencuentros, de decepciones y malos entendidos y juramos sin jurar que esta vez sería diferente.

Ahora me veo y no te alcanzo a ver, estás tan lejos que ya ni me escuchas. Te miro a lo lejos y todavía veo algo de mí en ti, quizás algo de mi culpa y mis miedos se trasladaron tambien a ti. 

Ahora estás llena de rabia, de envidia, de frustraciones y de pena que no te dejan ver lo que tienes por delante y, sin embarbo, poco a poco vas marchitando tu vida en la tristeza de no ser, en las alegrías de las victorias vacías, o en la soledad de verte sola y querer volver a ser la de antes.

Qué perversa ironía que tu sueño se haya llenado de realidad y metáfora cuando te veo girar infinitamente y tu estás segura de que el viaje no tiene retorno. Pero te veo, pese a que tu escepticismo lo niegue, te veo y te escucho, y las vueltas son siempre las mismas y el viaje no es infinito. Que el viaje se repita infinitamente no quiere decir que sea un viaje infinito, ¿cuándo lo vas a entender? ¿cuándo vas a llorar toda la puta noche porque al fin escuchaste...y viste?

Con el tiempo perdido ya no se puede hacer nada y no hay nada más frustrante que querer ayudar y no tener cómo hacerlo,  chocando continuamente contra tu pared, una y otra vez, hasta quedar exhausto.

Sin embargo, dentro de mi late cierta impotencia absurda por la que no tiene sentido sentirse mal ni siquiera en estos veinte minutos que he decidido dedicarle hoy.

Ojalá las conversaciones pendientes se pudieran matar con un vaso de whisky y ceniceros llenos de errores perdonados y compromisos eternos por alcanzar algun dia algo parecido a la felicidad...


No tengo nada que prometer, ni quiero prometer nada. Sólo quiero soñar sin corazones rotos ni asuntos pendientes. Probar suerte, lanzar de nuevo la moneda al aire y que esta vez no caiga por el lado de la soledad.

1 comentario:

MâKtü[b] dijo...

no te has dado cuenta que eso de juramos sin jurar suena absurdo hasta para mi, verdad?

bonito texto...pero solo eso, bonito.